Desde la Comisión Nacional de Derechos Humanos adherimos y acompañamos la 9na Marcha por el Derecho a la Salud Mental que se realizará este 11 de noviembre de 2022 en la ciudad de Córdoba, como se hace desde el año 2014 impulsada por un colectivo de organizaciones que se nuclean en defensa de las leyes nacional y provincial de salud mental, resonando y multiplicándose en otros lugares del país.
Este año se propone como consigna “Cumplir la Ley es prioridad. Hay que invertir en la comunidad” exigiendo no sólo la plena implementación de la Ley de salud mental sino también la inversión en el sistema de salud público y comunitario, en abordajes integrales e integrados, desde una perspectiva de derechos humanos, de género y diversidad.
Marchamos por diferentes motivos, por algunos históricos que merecen especial atención como las poblaciones que aún siguen esperando la reparación de sus derechos (sociales, laborales, culturales), sectores más vulnerados que siempre resultan ser los más afectados por políticas públicas deficientes y un Estado que se presenta constantemente en su faceta más represiva y punitiva. Marchamos también, para que se invierta y fortalezca una atención y acompañamiento integral, participativo e inclusivo para las personas con padecimiento subjetivo, para quienes transitan consumos problemáticos de sustancias, para les niñes, adolescentes y jóvenes, para las personas con discapacidad, para la población LGBTTTQINB+, para quienes se encuentren privadas/es/os de su libertad.
Acompañamos al colectivo organizador de la marcha, en el pedido de justicia para Ezequiel Castro, de 21 años de edad, quien el 8 de junio del presente año, fue detenido por la policía de Córdoba y alojado en el CPA (Centro Psíquico Asistencial) A los cuatro días de su detención, un móvil policial se presentó en el domicilio de la familia de Ezequiel informando que el joven se encontraba internado en el Hospital Misericordia. El libro donde se registran los ingresos al nosocomio indicó que el motivo era problemas respiratorios, pero el equipo médico le refirió a la familia golpes internos, deshidratación y somnolencia. El joven a su vez logró manifestarle a su familia y al equipo interviniente que había sido golpeado y que desde hacía dos días no le daban agua para beber. El día 14 de junio falleció en dicho hospital.
Ezequiel es uno de los tantos jóvenes que son víctimas de la violencia estatal e Institucional.
Instamos a la aplicación plena de la ley nacional de salud mental, al cierre de los manicomios y centros de encierro, pero con la garantía de que se abran dispositivos en la comunidad.
Instamos a que se garantice el proceso de justicia por Ezequiel y repudiamos el accionar represivo.
Por una salud mental integral, inclusiva y comunitaria
Comunicado del Colectivo organizador de la Marcha